Con dos meses de curación mínima y cuatro de máxima, el semicurado Marantona consigue el mejor sabor para los amantes del buen queso. Un exquisito bocado del que no se podrá prescindir.

Elaborado con la mejor leche de oveja manchega, sus ocho meses de maduración mínima hacen de este queso uno de los mejores y más exquisitos manjares para nuestro disfrute. Excepcional.

Cuando se parte un queso Viejo de Marantona se ve lo que nos ofrece y se huele lo que nos promete. Hay pocos placeres comparables a un buen trozo de este excepcional queso.

Si hay algo capaz de conseguir que un queso curado manchego sea más excepcional aún, es sin duda el aceite de oliva virgen de La Mancha. La mezcla de ambos manjares es difícilmente igualable.

No hay alimento que nos asegure el éxito como la Crema de Queso Curado y Viejo. Nunca volverá a suponer un problema la elección de nuestros aperitivos.

Capaz por sí solo de hacer del plato más sencillo la mejor de nuestras recetas. Su extracción en primera presión en frío hace de él un aceite inmejorable.

Cuando probemos este aceite de fabricación ecológica, nuestros platos no volverán a quedarse sin el sabor del que no desearemos prescindir en adelante. Imprescindible.

Los pescados con los que acompañemos este vino no tendrán el mismo sabor; el mejor verdejo que consigue acercarnos hasta el mismísimo corazón de La Mancha.